Animales en chiapas






AVES
* Chachalaca
Son sociales, puede ser muy ruidoso y, a menudo siguen siendo bastante comunes, incluso cerca de los seres humanos, ya que su tamaño relativamente pequeño los hace menos deseables para los cazadores que sus parientes más grandes. Que tanto se parecen a las pavas, y los dos han sido comúnmente colocan en una subfamilia juntos, a pesar de las chachalacas son probablemente más cerca de la pavones. [1]

El nombre genérico se deriva de la palabra griega όρταλις, que significa "polla" [2] o "gallina doméstica". [3] El nombre común es una onomatopeya para el cacareo de cuatro notables de la llanura Chachalaca (O. vetula). [4]

Datos de ADN mitocondrial y nuclear secuencia sugiere tentativamente que las chachalacas surgió como un linaje distinto durante el Oligoceno, alrededor de 40-20 millones de años, siendo posiblemente el primer linaje de crácidos moderno para evolucionar, lo que está de acuerdo con el registro fósil conocido - incluyendo indeterminado, crácido-como los pájaros -. que con mucha cautela a favor de una expansión de norte a sur de la familia [1]


* Cojolite
    El cojolite (Penélope purpurascens), ave del tamaño de un pavo pequeño, de grandes alas y cola larga, es pariente muy cercano del hocofaisán, aunque, a diferencia de esta tímida ave, ha logrado sobrevivir en hábitats modificados incluso por el hombre.
    No obstante, esta facilidad de adaptación no ha evitado que, al igual que otras numerosas especies, esté en riesgo de desaparecer y su preservación sea parte de los programas prioritarios de las asociaciones conservacionistas, como Pronatura Península de Yucatán, A.C.
    EL pavo cojolite, ajol o faisán "gritón", como también suele llamársele, es de color café oscuro, con una iridiscencia púrpura o verde pálido, plumas del pecho y abdomen de orillas blancas y "papada" roja; es confundido a veces con el hocofaisán o kambul, ya que de lejos ambos muestran una especie de cresta.
    Sin embargo, a los cazadores les resulta fácil diferenciarlas, ya que el kambul se calla y se esconde ante la presencia de extraños y el cojolite se alborota y cacarea.
    Hasta hace algún tiempo, se podía encontrar cojolites en los bosques tropicales del norte de Sinaloa, en el centro de Tamaulipas y en la región que se extiende por ambas costas hasta el Itsmo de Tehuantepec y hacia el Este, atravesando Chiapas y las partes boscosas de la Península de Yucatán.
    El cojolite puede vivir incluso en los bosques altos rodeados de nubes y en ciertos bosques característicos de las mesetas de Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas, por lo que su localización es más amplia que la del hocofaisán (sobre el cual publicamos amplio reportaje el 29 de diciembre pasado).
    El índice de población más alta del cojolite se registra en los bosques tropicales vírgenes de Chiapas y al oeste del río Salto, en San Luis Potosí. En Yucatán, su población ha disminuido notoriamente y son raras las ocasiones en que se puede hallar algunos grupos de pavos cojolites.
    El cojolite se reúne en bandadas de número indefinido y es difícil saber la proporción de machos y hembras, ya que en apariencia son iguales. Son principalmente arbóreos y rara vez bajan a la superficie.
    Es común verlos en las copas de los árboles, se desplazan de rama en rama en "vuelos cortos", cacareando siempre y tratando de descubrir algún ruido extraño que responda a su llamado. Los cojolites o ajoles se distinguen también por su canto quejumbroso, especialmente por las mañanas, cuando abandonan sus nidos.
    La época del apareamiento es aproximadamente a fines de marzo. Los machos se dedican a amenazar a sus rivales con fuertes gritos y sonidos guturales, se persiguen unos a otros hasta las copas de los árboles y se golpean con las alas que baten rápidamente al volar de rama en rama.
    La hembra los observa un momento y luego continúa su rutina diaria en espera del ganador, con el cual formará su próxima familia.

* Colibrí
Hábitats y adaptaciones
Los colibríes han conquistado una gran cantidad de hábitats, entre los que se pueden mencionar están los páramos, los manglares, las sabanas; pero la mayoría viven en los bosques lluviosos o siempre verdes. Constituyen una gran importancia para las plantas; pues al igual que los insectos y los murciélagos, toman parte en el fenómeno de la polinización. Pero todo ello ha sido posible a la gran cantidad de adaptaciones para conquistar los diversos tipos de bosques del continente. Entre esas adaptaciones podemos citar el pico, que tiene diversas formas y tamaños para los diferentes tipos de flores. Los colibríes son muy activos y necesitan consumir gran cantidad de néctar, algunos consumen la mitad de su peso en alimento.
También tienen la capacidad de regular la temperatura en tierras altas y frías. A pesar de su pequeño tamaño y alto metabolismo, tienen un mecanismo de ahorro de energía, el cual consiste en bajar la temperatura de 37.5º C a 17º C, para ello disminuye la actividad. Su lengua es inmensamente larga, tan larga que debe arrollarla en un cavidad que posee en la cabeza, además es controlada por una gran cantidad de músculos que ocupan una cantidad considerable de espacio en el cráneo del colibrí. (Figura 1)


Alimentación
Los colibríes son nectarívoros por excelencia, su larga lengua les permite succionar el néctar de las flores a través de la estructura arrollada en la parte exterior de la lengua.
Las flores que son visitadas por los colibríes son tubulares, tienen abundante néctar y generalmente tienen una tonalidad roja, rosada o anaranjada -aunque los colibríes visitan flores de todos colores - Generalmente las flores de las que el colibrí extrae su alimento no ofrece un lugar para posarse, pues son flores colgantes, pero eso no es ningún problema para ellos. Los colibríes son animales sumamente rápidos, pueden batir sus alas hasta por 70 veces por segundo manteniéndose en el mismo sitio mientras extrae el néctar de la flor.
A menudo los tubos florales se adaptan muy bien con la longitud de la curva de sus picos. Pero el caso más curioso es quizás el del colibrí que perfora a la flor por un costado para extraer el néctar ante la imposibilidad de obtenerlo de la forma común, convirtiéndose así en un ladrón de néctar. (Figura 2).
Aunque los colibríes se alimentan principalmente del néctar de las flores complementan su dieta con pequeños insectos y arañas que atrapan en el momento en que visitan la flor. Se dice que un colibrí puede visitar de 500 a 3000 flores p

* Gallina de monte
  La gallina de monte (Tinamus major), singular ave que habita en los bosques tropicales desde el sur de Veracruz hasta el norte de Oaxaca, Chiapas y la Península de Yucatán, parece a simple vista un pollo pequeño, pero con el cuerpo más redondo y casi sin cola.
   La hembra tiene un comportamiento muy especial, ya que desatiende sus obligaciones maternas y el macho tiene que hacerse cargo de las crías: desde preparales el nido hasta cuidar de los polluelos.
    Su vuelo es similar al de un faisán, pero la mayor parte del tiempo permanece en tierra, mientras no se vea amenazada. Busca semillas e insectos en los claros, aunque está mucho tiempo en la espesura.
    Las gallinas de monte pertenecen a la familia tinamidae y al orden de los tinamiformes. Son aves primitivas estrechamente relacionadas con las avestruces. En México habitan cuatro especies y todas tienen en común su carácter escurridizo y poca tendencia a volar mientras no sea necesario.
    De acuerdo con datos proporcionados por Pronatura Península de Yucatán, A.C., el comportamiento de las gallinas de monte es diferente al de otras aves. La hembra, de mayor tamaño que el macho, de plumaje más brillante, es la que toma la iniciativa en el cortejo previo al apareamiento. El macho, por su parte, se dedica después a la construcción del nido, incuba los huevos y cuida a los polluelos.
    En el libro de "Fauna Silvestre de México", de Leopold Starker, se menciona que una variedad de gallina de monte, crypturellus variegatus, cuya presencia está casi limitada a la Guayana Británica, incluso abandona al macho cuando éste se encuentra en el período de incubación, mientras ella va en busca de otra pareja. Poco después, ella misma u otra hembra regresan a dejarle al macho otro huevo, y de esta manera éste es capaz de criar hasta tres polluelos en una temporada.


* Garza rojiza
    En la ciénaga de Celestún, al mediodía, cuando los intensos rayos del sol deslumbran al reflejarse sobre las poco profundas aguas pantanosas rodeadas de manglares, un grupo de garzas rojizas (Egretta rufescens) ejecuta graciosos saltos con las alas extendidas en busca de alimento.
    Como ágiles danzantes, abren las alas para hacer sombra en la
superficie del agua y distinguir mejor a los peces que constituyen su dieta principal.

    Corren en zig zag saltando entre las aguas someras, siempre con las alas abiertas al perseguir a los peces hasta atraparlos. Pocas garzas lucen tan admirables mientras cazan, dando vida con sus colores y ágiles movimientos a la monotonía de los esteros altamente salinos donde se alimentan.
    La garza rojiza es de colores llamativos. Tiene canela oscuro el
cuello, las alas y el cuerpo gris y el vientre claro. De esta misma especie existe una que es blanca completamente.

    Es una de las siete garzas del mundo que presentan este dimorfismo en su plumaje, por lo que pueden encontrarse individuos blancos y canelos durante todo el año.
    Sus largas piernas son negras, pero se tornan azuladas durante la época de reproducción. En los adultos, el pico es de color carne con la punta muy negra, mientras que los jóvenes tienen todo el pico negro.
    No existe diferenciación entre los sexos. Habita exclusivamente en las zonas costeras, en pantanos, ciénagas, lagunas y bahías. Su distribución es muy local, es decir, no se extiende por grandes zonas sino que ocupa sitios específicos.
    Sus estrechos requerimientos de hábitat y su distribución altamente restringida hacen de la garza rojiza una especie muy vulnerable al desarrollo de los sistemas costeros, a tal grado que se considera como especie amenazada.
    Se encuentra principalmente a lo largo de la costa del Golfo de México y del Mar Caribe, con algunas poblaciones pequeñas en las Bahamas, la costa atlántica de Florida y las costas del Pacífico mexicano.